Bañarla la tengo que bañar igual


Bañarla la tengo que bañar igual

Es asombroso como Dios nos puede hablar con las cosas más rutinarias que vivimos, es así como me está hablando últimamente… en realidad creo que siempre me habló así solo que últimamente estoy más atenta a Su voz y ahora me doy cuenta ja ja ja.
Hace 7 semanas que soy mamá  de una bellísima bebé, y es maravilloso cómo comencé a entender la relación de Dios Padre conmigo como su hija a través de mi relación de mamá con mi hija. 
A mi bebé  le toco su famoso “primer baño”,  así que toda expectante con mi marido armamos todo para dicho acontecimiento (aclaro soy mamá primeriza), lejos de ser un momento grato, al meter a mi hija en el agua y comenzar a bañarla fue un llanto y grito permanente, sus piernitas y bracitos se agitaban enérgicamente, ya no sabía cómo calmarla y sostenerla… con mi marido nos mirábamos sorprendidos de ver cómo de una cosita tan pequeñita de solo 4 kilos saliera tanto descontento, así fue su primer baño… y su segundo… y su tercero…. Al cuarto pensé: bañarla la tengo que bañar igual pero no quería que ella la pasara tan mal, fue entonces que decidí preparar un ambiente, puse adoración y mientras preparaba todo le hablaba con una voz suave y de mucho amor, la metí en su bañera y su reacción fue comenzar  a llorar pero seguí manteniendo mi voz de amor y calma y ella decidió tratar de disfrutar de ese baño, obvio con cara de pocos amigos y no entendiendo mucho lo que pasaba se dejó bañar. Y fue ahí cuando Dios me habló…
Entendí que mi Papá Dios me decía: - muchas veces mis hijos son así conmigo, cuando los meto en mis aguas de sanidad, de purificación, de limpieza, en vez de dejarse llevar por esas aguas comienzan a agitarlas con sus quejas, su ansiedad, su descontento de ser procesados. Obvio no es lindo ser procesado, pero como dije bañarla la tengo que bañar igual, pasar por pruebas o procesos debemos hacerlo igual sino ¿cómo crecemos, cómo maduramos? Y es acá donde entró una palabra que ya la conocía pero cobró su significado… SELAH… qué significa una pausa, reposo… y entendí que en medio de esas aguas en donde mi Padre quiere sumergirme si yo entro en reposo Él va a poder bañarme para sanarme, purificarme y limpiarme sin que yo entre a agitarme, enojarme y ansiarme buscando que el apresure ese baño. Yo entendí que en medio de ese baño tengo que hacer una pausa y aprender, confiar que Él me sostiene con sus brazos y buscar escuchar Su voz para entender lo que Él quiere enseñarme… si bañarme me tiene que bañar igual por qué no aprender a reposar en Él y entender que (como escribió Marcos Brunet en su libro) Él ya perdonó todo pecado, ya sanó toda enfermedad, ya cambió la maldición en bendición. Ya hizo el camino, lo único que tenemos que hacer es transitarlo (es bañarnos ja ja) para llegar al otro lado, victoriosos!

“Estad quietos, y conoced que yo Dios;…”
Salmos 46:10ª

(Les dejo lo de preparar el ambiente en medio del proceso para la próxima)

Yasmin Falconnat


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